lunes, 9 de noviembre de 2009

LA LLAMA ENCENDIDA


Esta es la historia de un hombre que fue a la India y vió el palacio de un rey que estaba lleno de oro, que tenia cuadros preciosos, tenia gran cantidad de diferentes tipos de ornamentos muy valiosos y el estaba sorprendido por la gran prosperidad que había en ese reinado y se acerca como súbdito y le dice rey como es que tiene tanta prosperidad. Que en este palacio de 400 metros no se ve más que oro y cosas valiosas.

El rey le dice bien yo te voy a mostrar cuál es el secreto de mi éxito, te voy a pedir que vayas y recorras todo el palacio. Eso si, quiero que vayas con esta vela encendida, si cuando regresas después al finalizar todo tu recorrido esta vela llega apagada. Te decapito.

Al hombre le cambio su rostro, su sonrisa ya no existía. Tomo la vela y entro a recorrer el palacio con gran miedo por su vida.

Al finalizar, después de varias horas llega donde el rey y el rey lo abraza y le dice muy bien has llegado con éxito. ¿Te ha gustado mi palacio? y contesta. Solo he tenido ojos para mantener la llama encendida.

Y el rey contesta: Ese es el secreto de mi éxito, mantener la llama encendida.

Cuando buscas mantener la llama encendida, significa que buscas mantener la pasión y la pasión es el combustible que te permite viajar hacia tus sueños. Y debes saber que para mantener esa llama encendida hay que apartar las cenizas todos los días y colocar leños nuevos para que la llama no se apague.

¿Qué son las cenizas? Las cenizas representan tu pasado, el pensar que todo era mejor hace unos años. Las cenizas representa el ayer y el ayer es historia, y tu ya no puedes cambiar nada. Las cenizas representan las cosas que no te dejan crecer como la ira, la amargura, la falta de perdón, la envidia, los celos, el querer controlarlo todo, todo aquello que tienda a apagar el fuego del Espíritu. Las cenizas ensucian tu vida. ¿Cuáles cenizas pueden apagar tu pasión?

¿Qué son los leños? Los leños representan las cosas que pueden hacer que mi corazón se llene de amor, fe y esperanza. Los leños es lo que aviva mi vida hoy, no mañana porque el mañana no llega. Los leños son los que me permiten crecer y aprender, tiene que ver con el carácter: el amor, el gozo, la paz, la paciencia, la benignidad, la bondad, la fe, la mansedumbre y la templanza. Me encanta que la biblia dice que contra tales cosas no hay ley, es decir si las practico, si las añado a mi vida voy a vivir en libertad. ¿Cuáles leños necesitas añadir a tu vida hoy?

Ahora tanto el quitar las cenizas, como añadir leños cada día no es fácil requiere trabajo, así mismo nuestros sueños requieren de esa pasión para lograrlos, requieren esfuerzo.

”Esfuérzate por ser tan fuerte que nada pueda perturbar tu tranquilidad. Por ser demasiado sabio para preocuparte, demasiado tolerante para el odio, y muy valiente para tener miedo. En resumen, esfuérzate para ser feliz.” Anónimo

¿Cómo está siendo tu viaje hacia tus sueños?
¿Estás tratando de viajar con tu pasado encima, el pasado de no puedo, el pasado de las circunstancias?

O ¿Estás diseñando tu futuro, el futuro que es posible con disciplina, desprendimiento, discernimiento?
¿Estás viviendo tu propósito?

Cuando tú descubres tu propósito tú puedes mantener la llama encendida.

Hoy es el mejor día para elegir ir tras tus sueños, para avivar la llama de tus sueños.

martes, 3 de noviembre de 2009

FORTALECIENDO CONVICCIONES



No hay nada mas poderoso en el ser humano, que sus propias convicciones, cuando uno cree algo, aunque no lo planee, piensa en eso que cree, actúa de acuerdo a sus pensamientos referentes a lo que cree, y vive de acuerdo a lo que cree.
Si cree que es un fracasado, tendrá pensamientos de fracasos, y actuara como un fracasado, si se cree un rechazado, pensara en solo rechazos, actuara como victima de rechazos, y su autoestima le hará sentir rechazado.

Por eso, es que muy importante, meditar acerca de lo que pensamos, porque muchas veces hay pensamientos que siempre tenemos, y que sin darnos cuenta nos han dominado por años, y nunca nos dimos cuenta de ello, y resulta que simplemente se constituyeron en profundas convicciones que internalizamos en nuestra mente, sin tener conciencia de ello.

Tenemos que ser agentes activos en cuanto a lo que pensamos, y tenemos que tomar una posición de responsabilidad acerca de lo que hacemos al respecto, nuestros pensamientos no nos pueden dominar, ni limitar.

Cuando nosotros tomamos las acciones, para poder controlar nuestros pensamientos, no solamente estaremos en control de lo que pensamos, sino que también estaremos en control de lo que sentimos, y no solamente tendremos control de lo que sentimos en cuanto a los sentimientos, sino también de lo que sentimos en cuanto a las emociones.

Nuestros sentimientos y emociones se acoplan al molde del patrón de pensamiento que establecemos, en nuestro interior.

Si nuestro pensamiento es de derrota, así nos sentiremos, y nuestras emociones van a estar supeditadas a esa manera de vernos a nosotros mismos.

Es por ello, que ante las cosas mas comunes de la vida, cada persona tiene reacciones diferentes, por ejemplo:

La Lluvia; algunos sentimos emociones agradables cuando llueve, y hasta nos puede cambiar el humor en segundos.

La Salida del Sol; algunos podemos disfrutar cuando amanece a otros puede hacerles sentir una emoción diferente.

El frío o el calor; algunos nos sentimos mas cómodos son algunas de las dos temperaturas.

Lo mismo suele pasar, en cuanto a los fracasos, los temores, los tropiezos, las malas noticias, las buenas noticias, de acuerdo a como pensemos de nosotros mismos reaccionaremos, con satisfacción, insatisfacción, indiferencia. Todo dependerá de que hemos estado pensado por años, por meses, por semanas, por días, por horas, e incluso por minutos.

¿Cuántos perdieron su matrimonio?, por haber tenido por unos escasos minutos, una convicción equivocada acerca de su pareja, ¿Cuántos perdieron su empleo, por haber tenido una convicción acerca de su empleo, su jefe, su sueldo? luego vieron que no era así.

¿Cuántos se fueron de su casa, por haber tenido una convicción equivocada acerca de las reglas de sus padres, y ahora que maduraron ven sus propios errores, por dejarse llevar por sus ideas.

Sólo actuaron, de acuerdo a como le dijeron sus convicciones, pero de acuerdo a lo que pensaron hablaron, actuaron y decidieron, y ahora solo quedan las consecuencias.

Pero, tu trabajo es crearte convicciones reales, que estén basadas en metas que quieres lograr, en miedos que deseas contra-atacar, en temores que deseas superar, en heridas que deseas sanar, y en sentimientos y emociones que deseas dominar.

LAS CUATRO DIMENSIONES




A medida que vayas activando tu energía interior, comenzarás a darte cuenta de que puedes ser, hacer o tener cualquier cosa que quieras realmente en tu vida.
Has leído bien, hemos escrito "cualquier cosa que quieras realmente". En realidad, los únicos límites los pondrás tú.

Te diremos más: los que no consiguen lo que quieren de la Vida, en realidad, es porque no saben claramente lo que quieren.
Para comenzar a ver con claridad, esa claridad que te permita ser consciente de todas las posibilidades y oportunidades que existen y a las que tú puedes acceder, tendrás que prestar atención a tus cuatro dimensiones:

1. Dimensión Física: para vivir.
2. Dimensión Emocional: para amar.
3. Dimensión Mental: para aprender.
4. Dimensión Espiritual: para aportar.

Conocer la estructura de nuestra personalidad puede arrojar la luz suficiente para ver con claridad cuál es el propósito de la vida durante el tiempo que nos ha sido asignado en ella.

Es probable que el ser humano sea el más necesitado de todos los seres vivos pero, también es cierto que, es el que ha logrado descifrar el circuito de funcionamiento de sus necesidades; conocerlo te ayudará a encauzar y comprender muchos de tus deseos y a saber por qué los tienes y con qué fin los quieres satisfacer.

Pero, exactamente, ¿cómo se detecta una necesidad?
Podemos afirmar que "necesidad" es todo aquello que anida entre la situación que idealizamos y la realidad que vivimos.

Cuatro grupos de necesidades:

1. Físicas.- Incluyen los instintos o impulsos que garantizan nuestra vida y la conservación de la especie:

- Alimento
- Abrigo (ropa, vivienda)
- Salud
- Sexo
- Movimiento
- Descanso

2. Emocionales.- Abarcan los impulsos que hacen posible la convivencia. Se refieren a la tendencia que tenemos de obtener una relación con los demás seres humanos:

- Amor
- Amistad
- Confianza
- Competencia
- Aprobación
- Respeto
- Reconocimiento

3. Mentales.- Son las que el ser humano tiene que satisfacer para aumentar su sentimiento de valor:

- Autonomía
- Autoestima
- Conocimiento
- Equilibrio
- Libertad
- Realización

4. Espirituales.- Son las que dan sentido a la vida y que están relacionadas con los principios universales:

- Aportación
- Conciencia
- Integridad
- Justicia
- Propósito
- Servicio

En la medida que se produzcan carencias de alguna de ellas, se produce inseguridad y miedo en nuestras vidas (en nuestro tiempo, el deseo primordial de millones de personas, no es la felicidad, sino la seguridad).

Esquematizando diremos que:
Todos tenemos necesidades más o menos ocultas, de tipo físico, mental, emocional y espiritual que instigan nuestros deseos hasta acabar teniendo un motivo lógico y emocional para adquirir un determinado comportamiento.
Nos hacen perseguir el placer y evitar el dolor para que nuestra situación llegue a ser mejor a la inmediatamente anterior a dicho comportamiento.
Por eso, cuando corremos un riesgo; nos adentramos en territorios poco familiares o nos enfrentamos al mundo de una forma nueva: experimentamos miedo.
Y, muy a menudo, ese miedo evita que progresemos en nuestra vida.

Para que esto no suceda, lo mejor que podemos hacer es explorar los obstáculos que nos impiden vivir la vida a nuestra manera, evitar elegir el camino más cómodo y aprender a identificar las "excusas" que nos hacen resistirnos al cambio.